25 septiembre 2008

Descubriendo lo que quiero. (I)

Venga, ha llegado la hora. ¿Qué quiero ser de mayor? ¿Y qué quiero ser ahora mismo? Aunque parezca una tarea sencilla, elegir el futuro que quieres, siendo libre (o prácticamente libre) para tomar esas decisiones, es muy difícil.
Creo que yo he sido a lo largo de mi vida bastante “adaptativo”. Creo que no existe esta palabra pero la añadiré a mi propio diccionario. Para mi “adaptativo” es algo así como que en cualquier situación eres capaz de adaptarte a las circunstancias, similar a camaleónico pero sin los tintes despectivos ni artísticos que se le dan a dicha palabra. Yo he sido “adaptativo” cuando en verano era capaz de ir con niños desconocidos o quedarme con toda mi familia sin mis padres, o cuando en la universidad me quedaba sólo en el grupo de prácticas... dentro de mi ser asocial encontraba las capacidades dentro de mi para poner la mejor de las buenas caras sin faltar a la verdad y llegar a ser falso. Esto me ha llevado a que creo que podría haber estudiado casi cualquier cosa, trabajado en casi cualquier cosa, vivido en casi cualquier ciudad... es decir, creo que podría conformarme con casi cualquier cosa. Pero ese conformarse no está asociado con conformismo, porque realmente yo no era feliz conformándome.
Y en estas que uno se hace la pregunta de “Bueno, ¿y tú que quieres ser de mayor?” Para empezar a abrir el fuego diría algo así como: “Yo quiero tener una familia y tener tiempo para ella, tener hijos, tener un chalecito en la sierra donde pasar mis fines de semana y donde invitar a mis amigos a hacer barbacoas, tener un buen coche: todoterreno o de gama alta y poco más, viajar, tener hobbys...”. Eso no dice mucho de mi profesión, de mi forma de vida o de cómo ser feliz. Habla de objetivos pero no de medios. Y se puede llegar a ello siendo traficante de armas o siendo un funcionario que se lo monta bien.
Nunca me he planteado que profesión me hará feliz. Actualmente soy analista / desarrollador de proyectos informáticos. Que mal suena eso. Vamos que soy ingeniero informático, que trabajo en una mierda de consultoría, que no hago nada ni tengo un futuro claro y que todos mis sueños de hacer cosas chulas se fueron al traste al enfrentarme a la realidad laboral.
Y bueno, así he llegado ahora. Mi proyecto se acaba en unos meses y tengo que pensar donde quiero seguir caminando. Por ser hoy el primer día de mi reflexión tan sólo voy a escribir las diferentes alternativas que tengo:
a) Seguir en mi consultoría en otro proyecto
b) Fichar por la multinacional para la que trabajo actualmente subcontratado.
c) Fichar por otra gran empresa nacional para la que estuve trabajando subcontratado.
d) Buscar un proyecto realmente atractivo por alguna razón: tecnológica, responsabilidades, innovadora, ...
e) Dedicarme a otra cosa que no tenga que ver con la informática

Aquí, este abanico de ofertas faltan al menos un par de opciones que no contemplo una por inviable actualmente y otra indeseable por la experiencia que ya tengo:
a) La inviable: montarme mi propia empresa. Al menos es inviable pensar en vivir sólo de esto además de lo malo que puede ser para mi futuro.
b) La indeseable: cambiarme a otra pequeña empresa explotadora. No. En esta empresa me tratan más o menos bien, me dan ventajas y no estoy mal pagado. Pero no hay futuro. Pero aún menos en cualquier otra.

Y ahora, tengo que ver que me convence. Sobretodo, que me hace feliz. Creo que feliz me hará aquello que me de estabilidad, responsabilidades, nuevos retos, en lo que se me valore y que no me cueste excesivas horas ni esfuerzos. Lo quiero todo. Todo eso. Como veis ahora no hablo de casas ni coches ni dinero. Ahora mismo, no me preocupa para nada todo eso. Sólo quiero hacer algo en lo que me sienta realizado. Que me suponga horas invertidas y no perdidas. Que salga contento de trabajar.

Bueno, estas son las bases... otro día entraremos al trapo. Preparaos...

No hay comentarios: