No te hagas informático

Si eres un joven lector que todavía no ha decidido su futuro, su carrera profesional, sus estudios universitarios... y se te pasa por la cabeza ser informático, yo voy a ayudarte: no lo hagas.
Actualmente, en España la formación universitaria que se da no está orientada al mundo de la empresa, además de que en cuanto a título al ingeniero informático se le considera un ingeniero menor y al haber tanto intrusismo laboral te puedes juntar con gente que hace un curso de FP, un curso de tal lenguaje de programación o simplemente gente que puede valerles para el puesto con carreras tan dispares como Biología o ADE. Además, los planes de estudios están anquilosados pues en este mundo que se avanza tan y tan rápido, lo que hoy vale mañana no. Y sin hablar de la falta de orientación en cuanto al mundo laboral, que es un perfecto desconocido durante toda la carrera.
Pero si en el mundo de la educación el panórama pinta mal, ni hablemos el mundo laboral. El trabajo que hay es mucho, como se dice en todas partes. Es decir, si uno se lo monta bien, no se va a morir de hambre nunca. Eso sí, tampoco nunca va a poder comprarse un coche de alta gama o una casa en el barrio que deseas, incluso nunca harás el trabajo que habías soñado... tendrás que conformarme con migajas.
El trabajo que hay es mucho pero muy pobre: mal pagado y mal distribuido. El ingeniero no es más que cualquier otro a pesar de su formación (a veces será incluso menos), y encima, el trabajo para el que contratan no suele tener que ver con el trabajo que realizarás posteriormente.
Esto me dirán mucho pasa en el mundo de la consultoría. Pero es que el mundo de la consultoría (pequeña, mediana o gran consultora, da igual, la misma mierda es) es el 80% del negocio existente. ¿el resto? Empresas grandes (clientes finales) no dedicadas a la informática que necesitan informáticos en sus filas (y que sólo pueden llegar a esos puestos si antes pasaste por dicho cliente por medio de la consultoría) y algunas empresas de innovación (de momento no las conozco, no he llegado a poder trabajar ahi pese a mis intentos).
Entonces, te queda rendirte a los pies de la consultora. ¿Y por qué es tan terrible? Mira, tú situate en una sala con un ordenador durante 9 horas en las que no tienes nada absolutamente nada que hacer. Estás esperando que te manden a un proyecto. Nadie te dice nada. Un día llegan y pasan lista: ¿tú que sabes hacer? ¿Sabes este lenguaje? ¿Sabes esta suma de siglas de la que yo no tengo ni idea de que significan pues soy un comercial de mierda? Pues tío, ¡ponte las pilas!
Y un día te dicen: te voy a llevar a esta entrevista. Si te gusta bien... y si no, puerta. Y te tienen dos semanas con una incertidumbre insoportable. Como la más absurda marioneta. Como la más grande mierda, el número más insignificante en el mundo (he dicho número, pues casi no tienes ni nombre). Y el día de la entrevista te ocurren dos cosas: o te venden algo de forma maravillosa (que no es verdad al día siguiente) o te presentan algo que no te atrae para nada, en lo que te ves a las puertas del infierno... y sólo puedes meterte hasta dentro o ser empujado por una patada del comercial diablo.
Si crees que existe alguien que mira por tu carrera profesional, por tu trayectoria... sinceramente: no existe tal ángel de la guarda. Esto es la jungla, o pisas o te pisan... Nadie mira por ti mejor que tú mismo. Nadie. Que diferente de lo que yo me imaginaba...
Cuando te pones a trabajar hay de todo: proyectos chollo en los que haces tus horas y conoces buena gente en los que normalmente no aprenderás nada, y proyectos duros en los que te pasarás el día comiéndote los marrones que los de arriba han dejado caer sobre ti intencionadamente en este sano país del "vuelva usted mañana" que es España y en el que harás horas quemado aún sabiendo que en este proyecto si estás aprendiendo... incluso hay proyectos en los que echas horas y encima no aprendes nada...

En definitiva, si tienes dudas, si no sabes que hacer... no elijas esta profesión. Te podría dar mil y un motivos como la desmotivación de ser un objeto y no una persona, o de querer hacer cosas chu-las y quedarte más bien haciendo cosas chu-ngas. Hay afortunados evidentemente... pero la gran mayoría de los que conozco...somos infelices. ¿quieres ser infeliz?